lunes, 17 de agosto de 2009

Tras Un Fracaso

Tras un fracaso inoportuno vino
la brisa, irrumpiendo en mi tristeza
queriendo disimular la irradiación
de eso que no tenía sabor.

Pero fue más fuerte por suerte
el dolor de mi corazón.
No lo pudo calmar el cielo ni
el reflejo
de un amor.

El sermón que le iba dictando,
con un dejo de emoción
colgándome en travesías
hasta el hogar de la luna
fue sofocado por el río
y nunca finalizó.

Y por fin quedé libre,
de una falsa felicidad.
Ahora puedo entre los rayos
de la angustia disfrutar
sintiendo el real dolor de
un abatimiento reformista.
Contradigo lo que todos creen,
que es mejor ser feliz
-falsamente-.

2 comentarios:

darinka dijo...

Me gustó, sentí como que por medio de tu tristeza y angustia estabas siendo realmente feliz no como aquellos que falsamente creen ser felices cuando en el fondo no tan fondo en realidad, sus orígenes están llenos de soledad y triteza. Te quiero.

Gabriel dijo...

markii! buenisimo este escritoo!!! habia escrito algo muuuy largo, pero se me corto internet antes de que pudiera poner"publicar" y ahora tngo q escribir todo de vuelta y eso da mucha fiaca, por no utilizar otra palabra :P


nah, mas que nada iba de que yo tmb escribo, simples boludeces pero no viene al caso, y pude identificarme muchisimo con el sentimiento que le imprimiste... me gusto mucho tmb tu vocabulario y me voy a dar una vueltita por este blog a ver si encuentro algo igual de interesante :D


gaby...

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